21 jun 2011
baja la voz cuando estés en público
Al usar el móvil, evita hablar demasiado alto y molestar a la gente a tu alrededor. La tecnología de los celulares es tan avanzada que no es necesario que grites ni te pegues al teléfono para que la otra persona te escuche; si por razones de calidad de señal o ruido ambiental no puedes escuchar bien, amablemente pide a tu interlocutor realizar la llamada más adelante. No seas de los acomplejados que necesitan llamar la atención, seguramente esas personas necesitan aprobación hasta de los extraños para validarse.
2. Nadie tiene por qué enterarse de tus asuntos personales.
En estos tiempos tan difíciles, lo mejor es que resguardes al máximo tu privacidad. No falta quien pase nombre, teléfono, dirección y hasta tarjeta de crédito a alguna persona en el celular mientras está rodeado de extraños. También evita comentar sobre cuestiones familiares o tan privadas como qué comiste, cuánto alcohol tomaste o lo triste que estás por haber terminado tu relación. Para todos esos temas, es mejor hacerlo en privado.
3. Evita tomar llamadas o textear en reuniones.
Es típico ver en los restaurantes o en reuniones a alguien que recibe una llamada y se queda en teléfono como si no hubiera nadie presente. ¿Realmente hay llamadas tan vitales como para ignorar que estamos con personas frente a frente que requieren de nuestra atención? Y esto se traslada, obviamente, al texteo y al tuiteo: no hay nadie más grosero que aquel que se la pasa tecleando en el celular, cuando debería departir con los asistentes.
4. Al cine y al teatro vas a disfrutar, no a usar tu celu.
A pesar de los múltiples anuncios en cines y teatros, tanto en pantalla como en las paredes, los cuales ruegan apagar los móviles durante la función, nunca falta quien revisa sus llamadas o envía mensajes de texto; esto es tan molesto como si usaran su voz. Definitivamente, el mundo no se va a detener si no estás disponible por dos horas, ¿verdad? Entonces apaga tu celular (no sólo lo pongas en vibrador, porque eso también te distrae), desconéctate, relájate y disfruta cada que vayas a una obra o a ver la película de moda.
5. Al conducir, jamás uses tus manos para enviar mensajes.
Como está de más pedirte que no tomes llamadas mientras manejas tu auto -porque Bluetooth y manos libres facilitan esa situación- lo que sí debes evitar es enviar mensajes de texto. Tus ojos sólo pueden estar enfocados en un punto a la vez, y ni la calle ni la pantalla del celu son compatibles. En algunas ciudades ya hay multas para quienes hablan con el móvil; ahora faltan otras infracciones para quienes textean.
6. “Perdón, se me cortó la llamada…”
Hasta ahora, no hay un servicio de telefonía celular completamente infalible. Así, es típico que algunas de las llamadas se corten a la mitad de algo que puede ser importante. Jamás culpes a la otra persona por ese cortón, porque puede ser que seas tú el que lo haya provocado sin darte cuenta. Al reanudar la llamada, evitar también decir "se cortó", porque estarías estableciendo algo que ya es obvio
7. Si vas a hablar, sólo haz eso: habla.
En ocasiones, mientras estás al celular habrás tenido que buscar algún dato en la computadora, o en un cuaderno, o un artículo en el armario o en el escritorio. Bueno, si requieres de hacer cualquiera de esas tareas, amablemente pide a tu interlocutor reanudar la llamada cuando encuentres lo que necesitas. El tiempo aire se cobra, y tú tiempo y el de la otra persona también vale, así que no te distraigas en cosas que no tengan que ver con la llamada en cuestión.
8. Descarta los tonos de moda o fotos inapropiadas.
Tan bien que se oye el sonido de un teléfono clásico, ¿verdad? Ah, pero queremos tener el último tono de moda y que todo mundo se entere. Honestamente, eso sólo rompe con la regla de no llamar la atención a lo que no se debe. Así, los gritos, las canciones de moda más ruidosas, las frases de moda y otras linduras, no son bienvenidas. Igualmente, si tu teléfono móvil tiene la opción de poner fotos a tus contactos
9. Si estás en una fila, evita contestar.
Estás en la cola para comprar tu boleto en el cine, o para entrar a la sala, y recibes una llamada. Esto tiene relación con la Regla 2, pero es todavía más importante: tienes a una persona adelante y a otra atrás que están tan cerca, que no dudes que podrán escuchar hasta lo que te responda tu interlocutor y se enterarán de toooda la conversación. Igualmente, si estás en el metro, en el avión o en el autobús, nadie alrededor debería sufrir tu charla. Y recuerda: debes tener toda tu atención al entorno en un lugar público, no te vayan a sorprender.
10. Mensajes y charlas con significado
Por supuesto, cada quien tiene la libertad de mensajear o hablar lo que guste y con quien guste. Sin embargo, las personas con quienes hables o te mensajees en la gran mayoría de las ocasiones agradecerán que envíes textos con significado real y no sólo líneas tipo "¿qué onda?", o regresar las preguntas ("fui al cine", "¿fuiste al cine?"). A menos que tu interlocutor esté en la misma situación que tú (léase recostado en casa, tranquilo), lo más seguro es que lo pongas de mal humor con pláticas intrascendentes cuando hay presiones del entorno (trabajo, junta, cena).
